El aeropuerto de Londres Gatwick (LGW), el segundo más grande del Reino Unido, ubicado al sureste de Londres, es un importante hub internacional. Sin embargo, cuenta con solo una pista operativa (en realidad hay dos pistas funcionales, pero están tan cerca una de la otra que no se pueden usar al mismo tiempo).
No te dejes engañar, Gatwick está clasificado como el aeropuerto con una sola pista más concurrido de Europa y atiende a alrededor de 40 millones de pasajeros al año. Así, estamos ante un aeropuerto grande y concurrido, y tener una única pista también significa que tiene uno de los peores registros de vuelos retrasados en el Reino Unido. Un estudio de datos de la Autoridad de Aviación Civil británica de 2023 mostró que más de uno de cada diez vuelos hacia y desde Gatwick se retrasaron más de una hora, más del doble que en el vecino Aeropuerto de Heathrow, mientras que el tiempo medio de retraso fue alrededor de media hora. Por suerte, sus terminales están llenas de instalaciones y servicios de comida, bebida y entretenimiento mientras esperas.
Gatwick está dividido en dos terminales: Norte y Sur, conectadas por un tranvía elevado gratuito.
Si llegas en coche, puedes dirigirte directamente a la terminal correspondiente con fácil aparcamiento y cargos desorbitados por recogida y entrega. Si viajas en tren, llegarás a la Terminal Sur, a un par de minutos a pie de las salidas y llegadas. A cinco minutos a pie se encuentra el tranvía elevado que te llevará a la Terminal Norte.
Gatwick es sin duda el aeropuerto mejor conectado en el Reino Unido. Siempre es mi primera opción cuando uso un coche de alquiler, o sobre todo si tomo un tren, y no viajo directamente a o desde Londres. La estación de tren dentro de la terminal se conecta directamente con 120 estaciones de tren en todo el Reino Unido y con más de 700 con solo un transbordo. Los puntos clave en la costa sur como Brighton y Portsmouth son particularmente cómodos; en poco más de una hora puedes encontrarte ante playas de guijarros mientras miras hacia hacia el Canal y hacia Francia.
Si viajas hacia y desde Londres, el Gatwick Express es el servicio ferroviario rápido. Conecta directamente a la estación de trenes y autobuses de Victoria (a un paso del Palacio de Buckingham), y tarda alrededor de 30 minutos. Yo lo veo caro, por lo que prefiero tomar los trenes regionales Thameslink o Southern. Tardan alrededor de 15 minutos más pero cuestan casi la mitad. También hacen paradas en varios puntos intermedios prácticos, como Clapham Junction, ideal para seguir viajando o si no te alojas en el centro de Londres.
A menos que tengas tanto equipaje que el transporte público no sea una opción, evita tomar taxis hacia y desde Londres. Gatwick está a más de 32 km de la ciudad y viajar en coche lleva mucho tiempo, es tedioso y caro. Deberías reservar al menos 90 minutos y más durante las horas punta, que comprenden aproximadamente de las 6:30 a las 9 y de las 16:30 a las 18.
Si decides optar por un taxi, los servicios de transporte compartido como Uber y FreeNow ofrecen viajes mucho más baratos, aunque menos «auténticas», que los clásicos taxis negros. Los puntos de recogida de los servicios de transporte compartido pueden ser un poco complicados de encontrar en el aeropuerto, pues algunos se encuentran en ciertos niveles de los aparcamientos de corta duración. No pierdas de vista a los grupos de turistas impacientes cansados y confundidos mientras miran sus teléfonos, y lo más probable es que estés en el lugar correcto.
Gatwick ofrece todas las opciones habituales de alquiler de coches de las principales empresas, además de algunas compañías más baratas pero menos fiables. Las principales están convenientemente ubicadas en la Terminal Sur, mientras que Hertz también tiene un mostrador exclusivo en la Terminal Norte. Es decir, que en Gatwick te evitas tediosos traslados en lanzadera a un aparcamiento remoto para recoger tu vehículo, a diferencia de la mayoría de los aeropuertos del Reino Unido.
Si bien los precios varían según tu reserva, las fechas y la duración del alquiler, mi opción preferida es la compañía económica Drivalia, que cuenta con una oficina dedicada en el Sofitel Gatwick, justo afuera de las llegadas de la Terminal Norte.
A pesar del número de pasajeros y su mala reputación por los retrasos en los vuelos, pasar por seguridad en Gatwick es bastante rápido. En mi experiencia, la seguridad suele llevar alrededor de 15 minutos, cuando las cosas funcionan correctamente. Si el aeropuerto está muy concurrido y te preocupa el tiempo, puedes comprar un pase de Fast Track en el momento por el equivalente a un café. Es un truco que me ha salvado más de una vez.
Desde el verano de 2024, Gatwick está utilizando varios escáneres de equipaje de próxima generación en ambas terminales y espera haber actualizado todos los escáneres para mediados de 2025. Si te encuentras en una de estas filas, no necesitarás sacar tu ordenador ni los líquidos de tu equipaje (aunque lamentablemente la regla de los 100 ml sigue vigente). Estos avances ya están acelerando significativamente los controles de seguridad en todo el aeropuerto. Desafortunadamente, por ahora sigue siendo cuestión de suerte acabar o no en la fila de un escáner nuevo, a menos que tengas acceso al carril prioritario por tu estatus en la aerolínea o por tener billetes prémium.
La entrega de equipaje bastante agotadora y las colas a menudo pueden avanzar lentamente. En las ocasiones en las que he facturado el equipaje (suelo volar solo con equipaje de mano), las máquinas de autoservicio para pesar y etiquetar el equipaje apenas han agilizado el proceso. No te la juegues: el gran trasiego de gente se traduce en que deberás reservar una hora para la entrega de equipaje.
Hacer cola es imposible de evitar, sea cual sea el aeropuerto, y Gatwick no es una excepción. De hecho, es mejor que la mayoría, sobre todo si lo comparamos con su principal rival, el aeropuerto de Heathrow. Intenta evitar las horas punta de pasajeros, entre las 7 y las 10 de la mañana, y entre las 5 y las 8 de la tarde, cuando las colas son obviamente más largas, y no deberías tener gran dificultad para llegar a tu puerta de embarque.
Las dos terminales de Gatwick sirven principalmente a diferentes aerolíneas, aunque hay cierto cruce, por lo que es importante verificar tanto la aerolínea como tu vuelo para saber desde qué terminal partirás. easyJet y TUI utilizan ambas terminales, siendo la primera, de lejos, el mayor operador del aeropuerto con alrededor de 120 rutas. La mayoría de los vuelos de easyJet operan desde la Terminal Norte (su hub en el Reino Unido), pero si el número de tu vuelo está entre 6300 y 6599 inclusive, lo harás desde la Terminal Sur.
Solo tardarás dos o tres minutos en ir entre terminales gracias al tranvía elevado gratuito. Los tranvías llegan cada pocos minutos (lo verás en la cuenta regresiva que muestra la próxima lanzadera), lo que lo convierte en uno de los aeropuertos más fáciles para hacer trasbordos, a pesar de su tamaño y de las multitudes casi constantes.
Mientras que Gatwick opera muchas rutas de larga distancia, principalmente en Europa. Esto lo convierte en un centro de operaciones para aerolíneas de bajo coste como Wizz Air, Vueling, Norse Atlantic, además de easyJet y TUI, compañías que ahora representan dos tercios de su capacidad anual. Si tu vuelo es de larga distancia desde el extranjero, con compañías como British Airways o American Airlines, aterrizarás en la Terminal Sur. Esto es una buena noticia, ya que la Terminal Sur es más práctica en cuanto a accesos al transporte público y muy fácil de transitar, incluso aunque suela ser la más concurrida.
El acceso a la seguridad de la Terminal Sur y las maravillas que esperan al otro lado se encuentra en la planta de arriba, a la que llegas a través de la escalera mecánica situada detrás de los mostradores de facturación y de entrega de equipaje. Una vez pases el control, encontrarás la mayoría de los restaurantes y bares, si bien hay poco que destacar en cuanto a calidad. Yo suelo elegir Wondertree por su comida fresca, vinos independientes y vistas sobre la pista de aterrizaje.
Abajo tienes los duty-free, repletos de tiendas, incluido un Harrods de gran tamaño (ideal para recuerdos de última hora a precios excesivos) y el habitual y largo camino hacia las puertas de embarque. Dicho esto, date al menos 15 minutos para caminar hasta allí, sea cual sea tu puerta de embarque.
Gatwick es uno de los pocos aeropuertos en los que consideraría quedarme la noche antes de un vuelo. No solo porque los vuelos de la mañana temprano suelen ser más prácticos y económicos que los de después, sino también porque me encanta el hotel YOTELAIR ubicado a un minuto a pie de la seguridad de la Terminal Sur. Sus económicas habitaciones tipo cápsula presentan un diseñado excepcional, son cómodas y muy divertidas. Alojarme aquí también significa que no tengo que levantarme en medio de la noche y pagar un taxi porque es demasiado temprano para los trenes.
La Terminal Norte ha sido renovada recientemente y reabierto sus puertas en 2024, tras experimentar una transformación significativa y muy necesaria. Aspectos fundamentales como nuevos suelos, asientos, puntos de carga y una gran cantidad de tiendas y restaurantes nuevos la convierten en la más lujosa de las dos. Además, ahora cuenta con cinco salas VIP disponibles para reservar en comparación con las dos de la Terminal Sur.
Aparte de las tiendas de la planta inferior, a mí me encanta The Breakfast Club para reponer energías antes de un largo vuelo. Este local, que se presenta como un clásico café inglés, forma parte de una gran cadena de restaurantes hípster que crece por todo el Reino Unido, aunque a mí me parece más un diner americano. En cualquier caso, es curioso, tiene precios razonables y sirve comida abundante y deliciosa, además de buenos cócteles. Las mesas y sillas están muy juntas y puede llegar a ser sorprendentemente animado para ser solo una parada técnica para comer en el aeropuerto. Si prefieres una alternativa más refinada, Bar on the Balcony, justo enfrente, sirve excelentes vinos espumosos ingleses.
Al igual que ocurre con la Terminal Sur, no subestimes la distancia a tu puerta y prepárate para caminar mucho en casi todos los casos. No pierdas de vista los paneles de salidas y, una vez que aparezca el número de puerta, ¡no esperes demasiado antes de empezar la caminata hacia ella!
Oficialmente, Londres tiene seis aeropuertos internacionales entre los que elegir, es decir, una barbaridad. Si piensas volar a Europa después de unos días en Londres, otros aeropuertos podrían resultarte más baratos o prácticos.
Si vuelas desde o hacia Estados Unidos, Heathrow debería ser tu primera opción, ya que cubre la mayoría de destinos a través de casi todas las aerolíneas. Llegar a la capital es rápido y fácil, aunque no está tan bien conectado con el resto del Reino Unido como Gatwick.
Londres Stansted es el principal centro de operaciones de Ryanair, que conecta la capital británica con muchas capitales y ciudades secundarias (e interesantes) de toda Europa. Si bien la aerolínea es conocida por sus precios bajos y un servicio mediocre, Stansted es un aeropuerto sencillo y relativamente pequeño. Sin embargo, es un fastidio moverte al centro de Londres.
El aeropuerto de la Ciudad de Londres está en el corazón de la capital, pero ofrece vuelos limitados y potencialmente caros, por lo que es la opción preferida por viajeros de negocios para trayectos de un día.
Londres-Luton se encuentra al noroeste de Londres. Tras una reciente gran renovación, está ganando cada vez más popularidad. Es el centro de operaciones de easyJet, así que ofrece destinos en toda Europa, Oriente Medio y el norte de África.
Londres-Southend se encuentra al este de la ciudad, un caso atípico que sirve a unos pocos destinos en Europa. Se trata de una opción práctica si te diriges al este de la ciudad o más allá; de lo contrario, es poco probable que lo utilices.
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Código IATA | LGW |
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Conexiones | Londres |
Terminales | S, N |
Aerolíneas principales | Hainan Airlines, Uzbekistan Airways, Aegean Airlines |