Lo que en su día fue una antigua ciudad minera del centro de México es ahora un destino turístico floreciente y encantador, con calles mágicas por las que pasear, zonas consideradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y mucha diversión.
Entre los múltiples atractivos de Guanajuato figuran edificios que testimonian la Guerra de la Independencia mexicana, como la Alhóndiga de Granaditas, rincones fascinantes como la avenida de Miguel Hidalgo y su mercado, o los callejones del Beso y de la Condesa, preciosos jardines, funiculares con excepcionales vistas e incluso minas en las que evocar la vida en estos espacios de trabajo, como la Mina experimental El Nopal y la de Rayas.
La presencia de atractivos monumentos y esculturas de personajes ilustres se incluyen entre los tesoros artísticos de Guanajuato, en cuyas calles conviven la tradición y la modernidad, en un entorno fascinante cuyos moradores destacan por la hospitalidad, la animación y el buen ambiente.
Santa Rosa es una preciosa reserva natural que invita a practicar el ecoturismo, a acampar, a contemplar las aves y a descubrir la flora y la fauna de la región. Situada a 5 kilómetros al norte de Guanajuato, alberga recorridos guiados y preciosos enclaves como la Cuenca de la Esperanza.
Jardín Unión, también llamado "La Rebanada de Queso", es un espacio triangular en cuyo entorno se localizan multitud de locales gastronómicos, museos, teatros, hoteles y otros centros de ocio. En él se celebra el tradicional Festival Internacional Cervantino, que se llena de jóvenes y estudiantes. Además, el jardín El Cantador, del siglo XIX, es ideal para pasear entre columnas, oír música y desconectar.
Uno de los lugares más característicos de Guanajuato es este pequeño puente que une dos casas, a un lado de la Cuesta del Tecolote, y permite tomar un piscolabis o una bebida caliente en el restaurante asociado. Ofrece una experiencia deliciosa que evoca grandes gestas mexicanas, pues Miguel Hidalgo y su ejército conquistaron la ciudad en 1810 desde esta cuesta.
El Palacio de Gobierno es una construcción de estilo neoclásico con interiores influenciados por el art nouveau. En él se realizan labores legislativas y fotos inolvidables. Por su parte, la Casa del Conde Rul y Valenciana, concebida por al artista Eduardo Tresguerras, cuenta con una fachada de cantera rosa muy bonita, y además alojó al papa Benedicto XVI durante su visita a la ciudad. Alhóndiga de Granaditas es otro buen ejemplo de edificios neoclásicos admirables.
Aunque compite en belleza con el Palacio de Bellas Artes de Ciudad de México, el Teatro Juárez, de estilo dórico romano, se encuentra en una plaza muy popular de Guanajuato, perfecta para pasear y tomar algo.
Pasear por Guanajuato supone descubrir rincones únicos y recibir sorprendentes estímulos. El símbolo urbano por excelencia es la calle Miguel Hidalgo, de 3 kilómetros de largo y con un trazado muy singular, debido a las montañas que la definen. Además, el callejón de la Condesa, en el que quizás puedas encontrar a la mítica condesa confinada que le da nombre, te ofrece otra vivencia imaginativa y fascinante.
El callejón del Beso está protagonizado por dos balcones que se encuentran separados por solo 68 centímetros. La leyenda dice que si besas a tu pareja en el tercer escalón del callejón, obtendréis siete años de felicidad asegurada. ¡No cuesta nada intentarlo!
El funicular panorámico permite admirar a vista de pájaro toda la belleza de la ciudad de Guanajuato. Puedes cogerlo en El Pípila o en la parte trasera del Teatro Juárez, de 9 a 22 horas, excepto los sábados, cuando está disponible de 10 a 21 horas.
Es posible explorar el origen minero de esta ciudad disfrutando de la ruta de las minas de Guanajuato, que engloba espacios como el monumento más profundo del mundo: la Mina de Rayas, descubierta en 1558 y con casi 500 metros de profundidad. También la Mina experimental El Nopal constituye una visita de gran interés para los turistas.
Además de ser uno de los centros de formación universitaria más importantes del país, el edificio neoclásico de la Universidad de Guanajuato ofrece una presencia fascinante edificada en cantera verde, así como una escalinata monumental y excelentes vistas.
Pasear por Guanajuato supone descubrir rincones únicos y recibir sorprendentes estímulos. El símbolo urbano por excelencia es la calle Miguel Hidalgo, de 3 kilómetros de largo y con un trazado muy singular, debido a las montañas que la definen. Además, el callejón de la Condesa, en el que quizás puedas encontrar a la mítica condesa confinada que le da nombre, te ofrece otra vivencia imaginativa y fascinante.
El callejón del Beso está protagonizado por dos balcones que se encuentran separados por solo 68 centímetros. La leyenda dice que si besas a tu pareja en el tercer escalón del callejón, obtendréis siete años de felicidad asegurada. ¡No cuesta nada intentarlo!
El funicular panorámico permite admirar a vista de pájaro toda la belleza de la ciudad de Guanajuato. Puedes cogerlo en El Pípila o en la parte trasera del Teatro Juárez, de 9 a 22 horas, excepto los sábados, cuando está disponible de 10 a 21 horas.
Es posible explorar el origen minero de esta ciudad disfrutando de la ruta de las minas de Guanajuato, que engloba espacios como el monumento más profundo del mundo: la Mina de Rayas, descubierta en 1558 y con casi 500 metros de profundidad. También la Mina experimental El Nopal constituye una visita de gran interés para los turistas.
Además de ser uno de los centros de formación universitaria más importantes del país, el edificio neoclásico de la Universidad de Guanajuato ofrece una presencia fascinante edificada en cantera verde, así como una escalinata monumental y excelentes vistas.
Almorzar en un restaurante de nivel medio en Guanajuato te costará unos Mex$ 80; y cenar, alrededor de Mex$ 150. Entre las recomendaciones de locales gastronómicos habituales en Guanajuato figuran El Jardín de los Milagros, un restaurante de autor con sabores mexicanos; La Capellina Restaurante, que sirve un menú variado con pizza gourmet y mariscos espectaculares; Casa Valadez-Anfitrión & Gourmet, que cuenta con una terraza situada en un edificio colonial y comida internacional de alta gama; y La Vie en Rosa, donde puedes probar la mejor torta de la ciudad.
La mejor época para visitar Guanajuato es el mes de octubre, fecha en la que se celebra el Festival Internacional Cervantino y las calles se llenan de cultura, fiesta y diversión. Aunque, eso sí, deberás realizar tus reservas con antelación para no quedarte sin alojamiento. La ciudad goza de un clima templado y una temperatura promedio anual de 18 ºC, que alcanza su época más calurosa en mayo y junio, cuando las temperaturas rondan los 30 ºC. El mes más frío es enero, aunque difícilmente las temperaturas bajan de los 6 ºC.
El aeropuerto internacional de Guanajuato es el destino habitual de los viajeros que llegan en avión a esta ciudad. En él aterrizan vuelos desde Ciudad de México, Monterrey, Tijuana, Cancún y otras ciudades del país y de Estados Unidos. Se encuentra a unos 32 kilómetros del centro, al que puedes acceder tomando un taxi que te costará unos Mex$ 450.
Para viajar desde Ciudad de México a esta población hay que dirigirse hacia el norte por la carretera 57D, dirección Querétaro, y al llegar es preciso conducir hacia Celaya por la 45D, seguir hacia León y tomar la salida Guanajuato Cuota.
Las líneas ETN y Primera Plus gestionan viajes frecuentes en autobús desde Ciudad de México y otras ciudades a Guanajuato. El viaje desde Celaya, que tarda 2 horas y 40 minutos, cuesta Mex$ 170,66.
Lo mejor es instalarse en el centro histórico de Guanajuato, pues concentra los principales atractivos turísticos de la ciudad, aunque los apartamentos, hoteles y B&B de sus alrededores resultan más económicos. Entre los alojamientos de precio medio más recomendables de la ciudad se encuentran el Hotel San Diego, el Mesón de los Poetas y el Hotel Gran Plaza & Convention Center. Como rango de precios, lo normal es que una noche en una habitación doble cueste entre los Mex$ 3399 del Hotel Boutique 1850 y los Mex$ 640,25 del Hotel InterForum Express.
1. El Zangarro es un barrio envolvente, tranquilo, mágico y regenerador que permite alejarse del centro urbano de Guanajuato y disfrutar de sus esplendorosos amaneceres y anocheceres, en un entorno más natural.
2. León es un municipio cercano, situado a menos de 50 kilómetros y que ofrece una increíble variedad de locales hoteleros y grandes atractivos, como el zoológico de León, el Templo Expiatorio del Sagrado Corazón de Jesús y el Centro de Ciencias Explora.
3. El centro de Guanajuato concentra sus principales atractivos históricos, como el callejón del Beso y las plazas del Baratillo y de San Roque, así como la oferta más interesante, aunque no la más económica, de alojamientos.
El servicio urbano de autobuses en Guanajuato es una buena opción para moverse por la ciudad. Es eficiente, fiable y asequible, pues un billete sencillo cuesta Mex$ 7, aunque para los estudiantes y las personas de la tercera edad vale la mitad.
Existen dos tipos de taxis, los blancos y los verdes, que suelen ser más económicos. Lo habitual es que un desplazamiento normal por la ciudad, por ejemplo desde la Alhóndiga de Granaditas a El Pípila, te saldrá por unos Mex$ 561.
Sobre todo si quieres moverte por el entorno de la ciudad, alquilar un coche en Guanajuato es una buena decisión. Puedes encontrar sucursales de compañías como Budget, Avis o Alamo y reservar tu vehículo desde 2400 Mex$ al día.
El Mercado Hidalgo asegura una jornada de compras variadas y muy entretenida, con souvenirs, artesanías, alimentación y mucho más a tu disposición. Si prefieres experiencias de compra más actuales en modernos centros comerciales, pásate por el centro comercial Plaza Pozuelos. El Mercado de los Hippies Quetzalcóatl, la tienda de dulces La Catrina y la galería de artesanía fina La Casa del Quijote son elecciones excepcionales para comprar.
Entre los supermercados más recomendables en Guanajuato figuran La Comer, Soriana Súper y Abarrotes El Centavito. Ten presente que lo normal es pagar Mex$ 30 por una cerveza en un bar y Mex$ 12 por un refresco en una máquina dispensadora.