Me gustó la puntualidad. También que, aunque el avión era pequeño y el equipaje de mano no cabía en las sombrereras, Te lo recogían y entregaban en la puerta. No me gustó que tuviéramos que usar el bus.
Me cancelaron el vuelo 2 veces en menos de 36 horas. Me lo re agendaron, pero luego casi me dejan fuera del vuelo y no querian despachar mi maleta. La comida fue escasa y mala. El trato de una de las azafatas ha sido asqueroso y penoso.
La experiencia de la tarjeta de embarque en Buenos Aires un desastre hay q hacer todo en mostrador cuando uno ya lo tiene en el celular. En vez de simplificar complican. El servicio de comidas mucho q desear la cena pésima, breakfast no hubo, desayuno malisimo un mini bocadillo asqueroso (literal).
Todo bien menos la comida que ha vuelto a empeorar
En general toda la tripulación bien ,salvo un joven que parecía tener prisa por despachar ya casi en la última fase de repartir merienda ,pero los demás geniales
El abordaje fue aceptable, el servicio a bordo fue malo, nos dieron la comida, y repartieron café a todos menos a los últimos, no terminaron de servir desde la fila 45 ABC en adelante, después paso lo mismo con el refrigerio. El año pasado iberia fue mejor.
Nos perdieron las valijas, así que no puedo calificar bien la experiencia . Mí señora estuvo 2 días sin ropa para cambiarse y debió salir a comprar. No es la primera vez que nos pasa con Iberia.
En menos de 3 días, me cancelaron un vuelo y me retrasaron otro 1 día. Me ocasionó varias pérdidas, de alojamiento y de media mañana en el trabajo.
Se robaron las cosas de valor de mis maletas durante el viaje
El abordaje fue extremadamente lento. La silla en económica fue demasiado incomoda. La comida mediocre, nos dieron muchísimo pan para llenarnos, era una hamburguesa y un sandwich muy delgados y sencillos, y ni hablar de las bebidas.
Organizar mejor la salida desde el avión después del aterrizaje.
Pésimo proceso de embarque. Falta personal, nos tuvieron largo tiempo haciendo cola. Salió una hora demorado. Al desembarcar no ponían la escalera trasera. Tardamos horas en salir del avión. Pésimo todo
Sacamos pasaje con embarque prioritario, pero nos hicieron embarcar junto con el grupo 1 , luego nos hicieron esperar a todos en la manga del avión para subir como unos 10 minutos)
Se retrasó el vuelo! Avisaron tarde q se retardaría! No ofrecieron nada durante la espera en un aeropuerto con alta temperatura de verano y para colmo el proceso de reclamación no es claro
Cómo siempre es una compañía que deja mucho que desear, intento evitarla lo máximo posible aunque a veces por tema de horarios es imposible y no me queda otra opción que volar con esta compañía.
Podría mejorar más las políticas de elección de asientos. Estuvimos una hora dentro del avión antes de aterrizar debido al tráfico aéreo. La verdad, fue bastante incomodo porque si de por si era largo el vuelo. Fue una experiencia claustrofóbica.
El vuelo bien, lo malo el embarque. Poca organización y con retraso
El personal es poco amable. Lento el embarque. El vuelo salió más tarde. El aterrizaje en Mahon fue muy brusco. El check in on line bien.
Esperamos a que desembarcaran los pasajeros anteriores y subimos nosotros, x eso no salió en hora, pero no fue larga la espera, fue aceptable, el embarque rápido y el vuelo muy bien la verdad,
Pues con Ryanair ya he puesto en X en la red social que se están poniendo demasiado pejigueros. El bolso de paseo ya no dejan llevarlo, por lo menos a mí me lo han hecho guardar en la bolsa de mano. Llevo mucho tiempo viajando con ellos y nunca me ha pasado, me lo han hecho en el viaje de ida y vuelta también. Las chicas que exigen hacer eso, meter el bolso en la bolsa de mano, muy déspotas. Quizás tendrían que hacerlo con todo el mundo y no solo con unos cuantos. Si no entra el bolso , se paga?? Otra cosa es que la gente tiene mucha cara y en vez de llevar un bolso pequeño llevan uno bastante grande.
Lufthansa, como prácticamente todas las compañías aéreas, abusan de sus clientes lo que les da la gana sin restricciones. Como al volar siento cierta ansiedad además de pagar el ticket normal tengo que pagar un sobreprecio al comprar los asientos y resulta que luego Lufthansa a pesar de haberme cobrado por esos asientos me los cambia a su voluntad lo que prácticamente supone una estafa. En mi último vuelo es lo que hizo y por ello mi vuelo fue nefasto. Estamos en unos tiempos en que los abusos están a la orden del día y parece ser que nadie tiene la intención de pararlos.
No me gusto el retraso de hora y media en la salida del vuelo
Nos obligaron a facturar y pagar 50€ por una maleta cuando la Ida de Madrid- Frankfurt nos la perdieron y rompieron, las personas que nos atendió no nos gustó el trato