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En pleno Golfo de México, en el Mar Caribe, Yucatán es sinónimo de playa, y unas vacaciones aquí le harán disfrutar sus días de descanso. Pero no todo son playas. Yucatán también es naturaleza, con sus célebres cenotes y sus reservas naturales; actividades como el buceo o el surf en las aguas del Caribe; arqueología, con sus ruinas mayas; y ciudades coloniales.
Gracias a un envidiable clima durante todo el año, cualquier época es buena para pasar unas vacaciones en Yucatán. El aeropuerto de Cancún, el segundo más importante de México, tiene conexiones con los principales aeropuertos del mundo, y está apenas a 40 minutos de esta zona, principal núcleo turístico de la región.
Cancún tiene la mayor oferta hotelera y de restaurantes de la zona, donde podremos degustar sabrosos platos yucatecos, fusión de sabores tradicionales, españoles y caribeños, sazonados con sus particulares recados. El rojo le da sabor a su plato más internacional, la cochinita pibil.
Fuera de Cancún, las cristalinas aguas de Playa del Carmen se han convertido en unos de los principales destinos de buceo del mundo. Al igual que la Isla Cozumel e Isla Mujeres, paraíso de surfistas que eligen Yucatán para sus vacaciones. En el centro de la región se encuentra el conjunto arqueológico de Chichén Iztá, que fue el principal centro político maya de la península y es considerado como una de las siete maravillas del mundo. Este yacimiento es, por sí solo, un motivo para ir de vacaciones a Yucatán.
La mezcla de cultura tradicional mexicana y colonial española se hace patente en sus ciudades, como Mérida, conocida como ""Ciudad blanca"", que ha sabido fusionar la tradición milenaria con la modernidad, o Valladolid, fundada sobre la antigua ciudad maya de Zací. Para disfrutar de la naturaleza podemos darnos un baño en sus famosos cenotes, depósitos de agua dulce filtrada, convertidos en piscinas naturales.